Los recuerdos de José Alcaide Artacho, Emigrante del Año 2022, nos trasladan hasta el número 65 de la conocida calle Julio César, donde nació, y lugar donde vivió hasta los 7 años para trasladarse hasta el número 3 de la Calle Roma. Primer hijo de los dos nacidos del matrimonio compuesto por José Alcaide Contreras y María Artacho Olivera, procede de una familia trabajadora, cuyo padre ostentaba el cargo de Oficial de primera administrativo en la conocida Agencia de Riotinto, mientras que su madre se dedicaba a las tareas de la casa y al cuidado de su familia.

Sus estudios se inician con la querida por todos Sor Modesta, con quien estuvo recibiendo clases desde los cuatro hasta los diez años, para posteriormente recibir educación en la Escuela de la Compañía con Dª Rosario Millares Díaz.

A nivel laboral ha realizado múltiples profesiones y ocupaciones: Dependiente en la Droguería de Vicente García Pastor, en la zapatería de José Manuel Fernández Chimeno, así como en la Ferretería Lázaro en Sevilla, en la conocida Calle San Jacinto. En su trayectoria laboral, destacan sus servicios en la empresa Poyconsa, en la que trabajó desde desde 1983 hasta 2007.

Desde 1967 reside en Sevilla, capital en la que han nacido sus dos hijos, fruto de su unión con Juani Benavente. A ellos, ha tratado de infundirles su pasión Por Nerva y el amor por el pueblo que le vio nacer.

Colaborador en múltiples proyectos relacionados con Nerva, destaca por ser cofundador de las reuniones de los antiguos alumnos de la Escuela de la Compañía, Junto a Antonio Vázquez y Jorge Ríos, evento que ha permitido emotivos encuentros entre nervenses y sus propias raíces. Desde hace años, con la publicación Nervae, es una pieza clave más en la recopilación de la historia de nuestro pueblo con sus interesantes artículos. También es miembro de la Hermandad de San Bartolomé, durante cuatro años ha participado en la dirección de la misma, aportando su grano de arena en la conservación de las tradiciones religiosas de nuestro pueblo.

En esta ocasión, la distinción Mayor del Año 2022 ha recaído en una persona muy conocida, concretamente Rafael Moreno Viera, un nervense de gran implicación en el seno de nuestra sociedad.

Rafael Moreno nace en el conocido Barrio del Pilar y a sus 87 años es el reflejo de nuestra historia como pueblo y la sabiduría de quien ha dedicado gran parte de su vida al servicio público. Transciende por ser una persona responsable, trabajadora y muy dispuesto a contribuir al dinamismo de nuestra sociedad, características éstas que le han procurado el reconocimiento y admiración de vecinos, paisanos y amigos.

A su edad, el conocimiento de su pueblo lo convierte en una de las grandes memorias vivas de nuestra historia y una inagotable fuente de consulta. Nacido en 1935, ha tenido una vida intensa y provechosa.

Como cualquier otro nervense, su andadura laboral transcurre de la mano de la actividad minera, desempeñando funciones en múltiples departamentos como balsas, al que accede con tan sólo 14 años, para posteriormente pasar por cocheras, oficina de trenes, palancas hasta llegar hasta el edificio de dirección.

En Nerva ha ostentado el cargo de Juez de Paz durante más de treinta años, siendo referente en la esfera pública y un respetado ciudadano que en su momento llegó a tener la condición de Diputado durante cuatro años y Teniente de Alcalde de nuestro municipio en esa vocación de servicio público que le caracteriza.

Miembro de la Hermandad de San Bartolomé, así como miembro destacado dentro de la Asamblea Local de Cruz Roja, son características que no hacen sino reforzar esa vocación de ayuda a los demás y compromiso social en cualquier ámbito.

En su historia personal es de reseñar su afición a los sellos y a la numismática, y fruto de ello aquellas inolvidables exposiciones organizadas en este sentido, en el Ayuntamiento, durante las Fiestas Patronales de San Bartolomé.

Procedente de Polonia, concretamente de la localidad de Koszalin, lugar en el que nació Wioleta Gruszka, Inmigrante del Año 2022, y donde residió antes de llegar hasta Nerva en un ya lejano 2006 para trabajar en la recogida de las naranjas en la empresa comarcal Riotinto Fruit.

Hija de Danuta y Piotr, tiene un hermano y hermana más, y es una de las tantas personas que procedentes de este país del este de Europa se encuentra perfectamente integradas en nuestra tierra, compartiendo su día a día con nosotros y aportando su grano de arena en el desarrollo de nuestra sociedad

Como cualquier otro emigrante, tuvo que dejar atrás a sus raíces y familia en busca de un futuro mejor y diferente, a causa de la situación de desempleo que le tocó vivir en su país de origen, donde durante mucho tiempo ejerció como profesional desde su propio despacho, que tuvo que cerrar a causa de la situación de crisis.

En nuestra localidad, conoce Manuel Ángel Domínguez, con quien comparte su vida y de cuya unión nació su hijo, David Manuel. Otro nervense más, resultado de ese sentimiento que atravesando fronteras y diferencias culturales se abre paso a toda costa para enriquecernos a todos.

Hoy día, se dedica a las labores de su casa, ya que por motivos de salud tuvo que abandonar la recogida de cítricos, centrándose en su familia y en el bienestar de los suyos.