La portavoz de la formación en el municipio, Isabel Lancha, considera que la actitud de Medio Ambiente es “angustiosa para la comarca” ya que solo funciona ante las denuncias de los colectivos ecologistas y partidos políticos.
Según informan desde IU a través de esta nota de prensa, ante las nuevas evidencias que apuntan hacia un nuevo vertido procedente del vertedero de Nerva hacia las aguas del río Tinto, Izquierda Unida de Nerva ha criticado este miércoles la falta de vigilancia y control por parte de la Junta de Andalucía y la “desidia” administrativa para tratar de evitar estos atentados ecológicos por lo que ha pedido que se investigue esta situación.
La portavoz de la formación de Izquierda Unida, Isabel Lancha ha señalado que es “lamentable que de nuevo, los colectivos ecologistas y las organizaciones políticas tengamos que hacer el trabajo de la Consejería de Medio Ambiente y asumir el papel que tendría esta administración por su propio funcionamiento”.
Lancha ha recordado que “no es la primera vez que ocurre un vertido de estas características” y ha mostrado su temor ante posibles nuevas incidencias si el invierno es duro en cuanto a lluvias”. Por ello, ha recordado, que el invierno pasado “ya denunciamos junto a Ecologistas en Acción la incidencia de estos vertidos en los que la Junta de Andalucía buscó una escusa burda para no asumir su falta de control y terminó por abrir expediente a la empresa”.
La también vocal territorial de Izquierda Unida en la Cuenca Minera ha señalado que “aún no sabemos si ese expediente terminará en sanción a la empresa Dictesa” y ha lamentado también “la opacidad y falta de información al respecto” en un tema en el que “la única garante de que las cosas se hacen bien debería ser la Consejería de Medio Ambiente”, mientras que “es más que obvio y manifiesto que con el vertedero de Nerva la Junta hace la vista gorda”.
Lancha ha ironizado asegurando que el consejero de Medio Ambiente, José Fiscal, “debe tener tortícolis de tanto mirar para otro lado con el vertedero de Nerva” y le ha aconsejado que “mire de frente a los problemas de este espacio, por su propia salud y por la de todos los vecinos de la Cuenca Minera”.
La denuncia, efectuada en primera instancia por Ecologistas en Acción, ha señalado que las aguas de lluvia se acumulan en el vertedero tóxico y entran en contacto con los residuos depositados contaminándose con metales pesados previo a su vertido al río Tinto a través de sus canales perimetrales.