La petición se ha realizado por carta enviada a través del alcalde de Nerva, José Antonio Ayala, que en la mañana de hoy ha mantenido una reunión con Morán, en la que también ha participado el portavoz de Ecologistas en Acción de Huelva y miembro de la Comisión por el Cierre del Vertedero de Nerva, Juan Romero. Desde la plataforma ciudadana apoyan a los compañeros que han asistido a la reunión y destacan la unidad, sin fisuras, en las distintas actuaciones que se están llevando a cabo por parte de la mencionada Comisión.

En la misiva, también se solicita a la Secretaría de Medio Ambiente, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que se impida la llegada de residuos procedentes de fuera de España y la implantación en la Cuenca Minera de nuevos vertederos, como la Planta de Tecnosuelos que pretende instalarse en Minas de Riotinto, “para que ninguna otra población de nuestro país, tenga que volver a pasar por infamias como la que ha tenido que pasar Nerva”.

Los miembros de Alternativa Ciudadana se presentan como un grupo de hombres y mujeres con distintos ideales políticos, pero sin representación política alguna, y un único denominador común: el cierre del vertedero de Nerva tras 25 años de actividad, a 700 metros de las primeras viviendas de la localidad, “con millones de toneladas de los peores residuos que usted pueda imaginar, almacenándose indecentemente en nuestra tierra, para acompañar nuestro devenir, por los siglos de los siglos”.

Alternativa Ciudadana manifiesta su más absoluto rechazo “a seguir soportando esta infamia, avanzado el siglo XXI y tras varias décadas de soportar este interminable fracaso político y este ilimitado abuso empresarial, los vecinos y vecinas de Nerva”. Y critican la falta de respeto con la que, a su juicio, ha sido tratada la localidad, por parte de los gobernantes de la Junta de Andalucía, primero bajo las siglas de PSOE y después bajo las del PP: “Ambos, los que lo impusieron y los que ahora lo mantienen, incapaces de dejar a un lado los réditos políticos y unirse en defensa de una Nerva que pretenden sombría y que nosotros, a pesar de los continuos reveses, nos empeñamos en que siga resplandeciendo. La premeditada ineficacia mostrada por ambas formaciones, sólo ha supuesto decepción y desengaño para la ciudadanía, y pingues beneficios económicos a las empresas relacionadas con el vertedero”.

A través de la carta, hacen llegar al Secretario de Estado el malestar por el olvido sistemático al que vienen siendo sometidos por las administraciones: “La Autonómica, que jamás se ha dignado en recibirnos, ni siquiera cuando nos desplazamos más de tres mil vecinos a las puertas de su Parlamento, y la Central, encarnada en Teresa Ribera, la titular del Ministerio al que usted representa, de la que aún estamos esperando respuestas a nuestras quejas y demandas, dos años después de habernos puesto en contacto con ella”. A la vez, también le agradecen el interés y la concesión de la reunión: “Eso sí, exponiéndole que no entendemos las continuas negativas que han manifestado desde su secretaría de estado, para que hubiésemos asistido tres o cuatro representantes a la reunión, en lugar de los dos, que usted ha autorizado”.

También le han hecho llegar el contexto en el que se desarrolla el día a día de la ciudadanía nervense: “Una realidad muy distinta a la de los intereses de las empresas que usan o gestionan el vertedero, el de una ciudadanía que se siente ninguneada, vejada y humillada, huérfana del afecto y del sentimiento de justicia que debe regir en cualquier decisión que afecte al día a día de los gobernados. A estas alturas todo el mundo sabe que Nerva tiene marcada a sangre y fuego las incisas heridas de un conflicto medioambiental que se tornó social, desde el mismísimo momento en el que se compraron voluntades al precio de mentiras disfrazadas de quimeras que con el tiempo acabaron diluyéndose como si de un azucarillo en el mismísimo océano se tratasen. Desde aquel nefasto día, en que a algún avezado dirigente o empresario se le ocurrió poner el nombre de Nerva sobre la mesa, nada ha vuelto a ser como antes. Nuestro sacrificio cargado de generosidad y solidaridad ha sido constantemente despreciado por quienes han ostentado el poder y con él, permitiendo impunemente que esta villa se halle sumida en el más absoluto de los abandonos”.