Retoman los trabajos de exhumación en las fosas comunes de Nerva con los que pretenden rescatar los restos de más de una veintena de víctimas de la represión franquista

por Juan Antonio Hipólito Domínguez / 16 de Febrero de 2021 / Publicado en Historia

El equipo de arqueólogos dirigido por Andrés Fernández, que inició en noviembre de 2017 la apertura de las fosas comunes del cementerio de Nerva, la más grande de Andalucía en zona rural, retoma los trabajos de exhumación en la fosa sur. El objetivo es recuperar los restos de más de una veintena de víctimas de la represión franquista, que se sumarían a los 23, ya recuperados de la fosa norte hace poco más de un año, que custodia la Administración local.


La reactivación de estos trabajos se ha podido llevar a cabo gracias a la subvención de 29.400 euros concedida por el Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Histórica del Gobierno de España a la Coordinadora Cuenca Minera del Río Tinto para la Memoria Histórica, que permitirá continuar con los trabajos de investigación, localización, exhumación e identificación de personas desaparecidas durante la guerra civil española en la localidad minera.

El trabajo de exhumación es especialmente complejo en la fosa de Nerva por la degradación que presentan los cuerpos expuestos durante más de 80 años la acidez del terreno minero, a lo que se suma la disposición en forma de apiñamiento que presentan los mismos, y aún esta por determinar si el equipo de arqueólogos se va a encontrar con un solo nivel o con varios, que es lo más previsible, visto lo ocurrido en la fosa norte. “De forma paralela al trabajo de campo también estamos investigando en los archivos municipales para intentar recomponer el puzle de lo ocurrido entonces”, añade el director del equipo de arqueólogos, Andrés Fernández.

Para el alcalde de Nerva, José Antonio Ayala, “ con esta actuación comienza a cumplirse la palabra dada por el Secretario de Estado para la Memoria Democrática, Fernando Martínez López, en la visita girada a Nerva hace un año”. No obstante, “aún hay mucho por hacer en este proyecto que para nosotros ha de ser política de Estado, tal y como se le trasladamos en su día a la vicepresidenta Carmen Calvo. Este proyecto no concluirá hasta que las víctimas reciban un enterramiento digno con el homenaje que se merecen”, subraya el primer edil socialista.

Ante la inquietud a la que puedan estar sometidos los familiares de las víctimas, y a pesar de no contar con un protocolo de actuación para informar a los mismos de forma detallada del proceso de exhumación emprendido, Ayala ha puesto a los técnicos municipales a disposición de todas las personas interesadas en seguir las intervenciones que se están llevando a cabo. “No tenemos ningún inconveniente en facilitar toda la información que precisen. Pero han de entender que estamos en pleno proceso de trabajo y tampoco hay mucha más información que la que ofrecemos por los medios de comunicación”, aclara el regidor nervense.

 

 

Los trabajos que ahora se reinician podrían complementarse en un futuro no muy lejano, de concederse la subvención de 58.900 euros que el Ayuntamiento de Nerva tiene solicitada a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para continuar con el proyecto global emprendido en 2017.

La subvención que sí está ya concedida es la que recibirá la Coordinadora Cuenca Minera del Río Tinto por la Memoria Histórica por parte de la Junta de Andalucía para la realización de un documental que contará con testimonios de familiares de las víctimas represaliadas en Nerva. “Solicitamos una subvención de 6.000 euros, pero finalmente tendremos que ajustar el presupuesto a los 3.000 que nos han concedido. La intención es recrear la situación vivida por las víctimas durante la represalia porque los trabajos de recuperación de los cuerpos han de complementarse con los de divulgación de esta historia para conocimiento de generaciones futuras”, aclara su coordinador, Juan Barba.

En Nerva se sitúa el enterramiento común más grande de los 120 contabilizados en Huelva, la segunda provincia con mayor número de fosas de su región. Se trata de la mayor fosa común documentada en una zona rural de Andalucía. Se encuentra en el interior del cementerio municipal y ocupa prácticamente todo el muro de la fachada principal, de extremo a extremo, con más de 200 metros cuadrados, a excepción de la puerta de entrada que divide a la fosa. 

 

 

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