Visitas residencias mayores
Las visitas a mayores en residencias geriátricas como la existente en Nerva no se permitirán hasta la fase 3 de la desescalada
Las visitas de familiares a los usuarios de las residencias geriátricas y centros sociosanitarios para personas mayores existentes en la Cuenca Minera de Riotinto, como la Residencia Geriátrica María de la Paz de Nerva gestionada por la Fundación Diagrama, tendrán que esperar hasta la fase 3 de la desescalada.
Las visitas de las personas mayores en residencias geriátricas no se podrán recuperar hasta la última fase del plan de transición, aquella que podría iniciarse en el entorno del 8 de junio en aquellas provincias que cumplieran los criterios establecidos.
Durante el presente estado de alarma, la Residencia Geriátrica María de la Paz de Nerva ha tenido que lamentar la perdida por coronavirus de uno de sus más de 100 usuarios. El fatal desenlace se produjo el pasado 1 de abril. Se trataba de una mujer de 87 años con pluripatologías previas. Días antes, nada más conocerse el positivo por COVID19, la Unidad Militar de Emergencia (UME) procedió el 24 de marzo a la desinfección de la residencia tras la petición realizada por el alcalde de Nerva, José Antonio Ayala. El 10 de abril, usuarios y trabajadores de la residencia daban negativo en el test rápido de coronavirus realizado por las autoridades sanitarias.
A pesar de no permitirse las visitas a los ancianos residentes en centros sociosanitarios, el plan sí puntualiza que en la fase 2 (que comenzará como pronto a finales de mayo) sí se podrían efectuar visitas a centros para personas con discapacidad o en viviendas tuteladas. Así, prevé, a partir de la fase 2 las visitas de un familiar a personas con discapacidad en residencias y viviendas tuteladas pero especifica que se podrán hacer salvo en el caso de las residencias de mayores.
En el ámbito de los asuntos sociales, prevé en la fase 0, que empieza el 4 de mayo, completar la incorporación de trabajadores sociales "dada su importancia en la protección de colectivos especialmente vulnerables".
En la fase 1, que arrancaría el 11 de mayo en aquellas provincias donde se cumplan los requisitos del Ejecutivo, se reactivarán progresivamente los servicios sociales, con atención prioritaria a colectivos más desfavorecidos, en función de las recomendaciones sanitarias establecidas.
Entre ellos, y en atención a las personas con discapacidad, las terapias de atención temprana, ocupacionales, de rehabilitación y psicosociales. Además, se llevará a cabo atención domiciliaria y seguimiento continuo a personas mayores que no vivan en residencias.
